martes, 19 de enero de 2010

La tertulia en la exposición de Sánchez Mejías

Ignacio Sánchez Mejías vestido de luces antes de hacer un paseíllo

Uno de los paneles de la exposición

Vista general de la exposición. Sobrecoge la espectacular imagen de Sánchez Mejías llorando y velando el cadaver de su cuñado José Gómez Ortega, Joselito.


Escena taurina de la infancia, cuando los niños jugaban al toro en la Alameda de Hércules


Dando muestras de su reputada fama como banderillero

Sánchez Mejías, junto a Juan Belmonte, antes de iniciar un peseíllo

Pose torera Sánchez Mejías

Una de sus reconocidas pasiones, coleccionar relojes de bolsillo

Cornamenta de toro, muleta y espejo de plata del ajuar personal del torero

Algunos miembros de esta tertulia junto al centro de nuestra devoción, el macareno José Gómez Ortega, Joselito el Gallo.

Tertulianos asistentes a la visita a la exposición: Carlos Moya, servidor, Sandra Arenas, Antonio Sánchez y José Ramón Ríos.
Y como en toda activada, siempre queda un rato para las risas............

El pasado viernes día 15 un grupo de socios de esta tertulia acudimos a la visita de la exposición dedicada al torero Ignacio Sánchez Mejías en el Casino de la Exposición de la que, como recordarán, se informó a todos los socios por carta por si querían acompañarnos. Desgraciadamente, pese a los esfuerzos denostados por organizar actividades que hace esta Tertulia, la respuesta no fue, precisamente, masiva.

La exposición con la que se rinde homenaje al referido torero por lo primero que sorprende es por su esmerado diseño y montaje. No es una manida exposición en la que se acumulen capotes, trajes de torear o carteles de toros (que los hay), sino que se analiza toda la personalidad del matador desde diferentes facetas de su vida: como torero, como periodista, como escritor y amigo de literatos, como hombre destacado de la sociedad sevillana -que le llevarán a presidir el Real Betis Balompié o a ser notable socio del Excmo. Ateneo de Sevilla-, o como "sindicalista" (si es que podemos llamarlo así) que le llevarán a presidir la Asociación de Matadores de Lidia y a reivindicar unos emolumentos dignos a su condición -que al final es el que se juega la vida en el ruedo- para el torero.

También hay cabida para narrar pasajes destacados de su vida, como cuando escapa de su casa ante la imposición paterna de abandonar la afición taurina por la medicina, sus estravagancias, como sus viajes en avioneta para llegar a las corridas, o sus amoríos.

Debemos resaltar el excelente trabajo realizado en el montaje y desarrollo de esta exposición por parte de la empresa Tannhauser Estudio, que ha invertido dos años de trabajo en la organización de la misma, la cual, además, contaba con el inconveniente de tenerse que adaptar a un espacio circular, lo cual dificulta notablemente dicho montaje. Paralelamente a la misma se ha organizo un amplio programa de actividades, conciertos, conferencias, mesas redondas, proyecciones cinematográficas o recitales poéticos.

En definitiva, una exposición que no deben perderse, sean o no aficionados a la Fiesta Nacional, pues Sánchez Mejías fue algo más que un simple torero. Esta muestra, que se inauguró el pasado 16 de diciembre y que estará abierta hasta el 31 de enero, tiene el siguiente horario:


Abierto
  • Martes a Sábado: 10:00-15:00 , 17:00-21:00
  • Domingo: 10:00-15:00
Cerrado
  • Lunes

(Fotos by Sandra Arenas)

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