El matador de toros sevillano Salvador Cortés no entiende su ubicación en los carteles del abono sevillano. Tras dos Puertas del Príncipe y dos puertas grandes en la Maestranza (11 orejas de matador y 5 de novillero), la empresa sólo le ha ofrecido una corrida 'complicada' en la Feria y la consolación del Corpus. Cortés, roto y completamente desanimado, denuncia el trato de la empressa Pagés y el respeto como torero a lo realizado.El matador de toros sevillano Salvador Cortés (11 orejas en Sevilla de matador y 5 de novillero), a pesar de estar anunciado en dos tardes en el abono sevillano, está profundamente abatido y hundido tras el tratamiento recibido por la empresa de Sevilla, que poco menos que le ha planteado una negociación como las lentejas: "O las coges, o las dejas". Cortés, antes de quedarse fuera de Sevilla, se ha visto 'obligado' a aceptar con resignación y rabia contenida la única opción que le ofrecía la empresa Pagés, a quien le llueve las duras críticas desde el propio estamento de toreros (Salvador Boix, Perera, Curro Vázquez y ahora Salvador Cortés).
Salvador Cortés ha perdido el 'miedo' escénico que existe hacia la empresa de Sevilla desde algunos sectores y ha 'reventado' ante su contratación de este año. "Siento una gran impotencia, rabia y decepción en estos momentos por esa falta de respeto que he recibido de la empresa Pagés. Me han hundido totalmente. No creo que me merezca la oferta única e inamovible de torear fuera de farolillos y sin atender ninguna propuesta para poder matar alguna corrida 'buena' en Feria, que creo que me merezco".
Salvador Cortés, cuya voz denota su bajo estado anímico tras el varapalo de la oferta única y excluyente de la empresa sevillana, hace balance y argumenta por qué considera totalmente injusta su colocación en la los carteles de esta temporada en Sevilla. "Estamos hablando de una plaza de toros en la que lo único que he hecho ha sido triunfar. Dos puertas grandes y dos Puertas del Príncipe en cuatro años consecutivos han sido mis frutos en Sevilla hasta 2008, único año en el que no pude triunfar en una tarde en la que maté una infumable corrida y otra que fue suspendida. Y ahora, en 2009, me dicen los empresarios que los únicos huecos que hay para mí en Sevilla son los que hay, y que no hay otra cosa. Que lo acepto o me quedo sin torear en Sevilla. Y ese, a mi parecer, no es el trato que merezco", comenta el sevillano profundamente decepcionado y con una palpable rabia contenida.
El torero sevillano, que esperaba estar en Sevilla dos tardes, una en preferia y otra en farolillos con una corrida de cierta garantía, no termina de entender la actitud de Eduardo Canorea y Ramón Valencia. "Parece ser que de todo el escalafón soy el único torero al que no le sirven los triunfos. Vengo de triunfar de América, el año pasado hice una campaña, bien es cierto que corta para lo que debería haber toreado, pero muy digna. Triunfé en Pamplona, en Málaga, en numerosas plazas españolas y sigo sin tener recompensa". Y eso sin nombrar su gran trayectoria en plazas de la importancia de Pamplona -en la que ha sido triunfador tres años consecutivos-, Bilbao, Vitoria, Málaga, Granada, Santander, Murcia, Albacete...
La desesperación y el abatimiento total es el estado de ánimo que inunda desde ayer al torero sevillano. "Te prometo que ya no sé qué tengo que hacer para ser respetado. Toda mi vida me he dedicado a prepararme, a luchar, a entrenar y nunca me han regalado nada. Es más, apenas me sirve dar tardes triunfales que marquen hitos en la historia. He triunfado en plazas en las que no me han vuelto a poner, he cortado 4 orejas en Pamplona y he estado casi un mes parado. He triunfado un día y al siguiente me han plantado delante de ganaderías sin garantías y nunca me han dado mi sitio". Cortés, en medio de la desesperación, lanza un grito de dolor bien claro: "Te juro que no puedo más".
A Salvador Cortés sólo le queda una pequeña ilusión, un pequeño motivo que le reporte fuerza suficiente para seguir hacia adelante. "Sólo espero que la afición, la prensa y los empresarios reflexionen y puedan apoyar y valorar a un torero que lo único que ha hecho ha sido triunfar, justificarse cada tarde y vivir para el toro. He sido capaz de poner muchas veces de acuerdo a miles de personas y no creo que eso sea producto de la casualidad. Para poder seguir triunfando deben darme mi sitio; sin oportunidades es imposible, y eso es lo que necesito y pido desde aquí, igualdad y respeto. El mismo respeto que yo siempre he guardado a la Fiesta y todos los profesionales de la misma. Nunca nadie me dio tiempo, siempre han ido a atacarme, a presionarme y llevarme hasta el límite para querer acabar conmigo, pero siempre respondí, allá donde fuere y con quien fuere, siempre he dado la cara y he demostrado mi vergüenza torera".
No obstante, en medio del dolor que inunda a este bravo torero sevillano en estos momentos, Salvador Cortés está convencido de sus argumentos y posibilidades. "Quiero ser figura del toreo y lo seré. Por eso he aceptado lo ofrecido por la empresa de Sevilla. Soy matador de toros y no me voy a achicar, y por ello he aceptado la única oferta. Hay que ser consciente que el panorama está complicado y tengo que estar anunciado en las ferias importantes, y triunfar que es mi obligación, pero lo que no quiero es que jueguen con mis sentimientos y mi dignidad".
Fuente: www.sevillataurina.com
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